PRESENTACIÓN DE LOS TALLERES DE SEXUALIDAD
Los talleres de educación
sexual se presentan a la comunidad educativa teniendo en cuenta las
problemática de Colombia frente a la formación de la sexualidad del ser humano.
Atiende a la formación
sexual de los niños y los jóvenes de las instituciones educativas, es un
proyecto de calidad se reconoce la sexualidad infantil y la importancia de
formar al niño no para la represión, sino para
la autorrealización y reconocer la importancia del aprendizaje de la
educación sexual en los niños.
Las vivencias, las actitudes
y la información. Estos tres componentes se desarrollan en los talleres
propuestos en este libro; se empieza por
el cuerpo, pareja, familia y sociedad. A la edad de 4 años es la edad de las
preguntas que parecen extrañas, si no precisamente incomprensibles, y cesan de
serlo si se piensa que en su mundo no hay lugar para lo casual o fortuito. Todo
siempre tiene el niño una causa, y por lo tanto, todo es susceptible de una
explicación.
Cuando el niño recibe
continuas desilusiones en las respuestas, llega a plantear preguntas casi
frenéticamente y sin esperar siquiera la respuesta .esto por estar en la etapa
del egocentrismo lo que lleva a no aceptar las explicaciones. A esta edad les
agrada escuchar cuentos, fabulas, contar historietas, imágenes, juegos, el
canto de ritmo y la repetición
La sociabilidad en expansión de un niño de cinco años se hace
más compleja por la importancia creciente que va asumiendo en el la vida sexual. Las niñas juegan a la mamacita y los
niños a los automóviles; en el campo sexualidad el niño manifiesta, en cambio
una sensibilidad menor porque los abusos en esta materia esta todavía casi
totalmente privados de malicia, aunque no hasta el punto de que el no intuya
que se trata de acciones reprochables.
A los seis años,
el niño estará establecido su rol
sexual. La figura de los padres es el eje principal de la identificación
sexual, ya que ellos, como modelos o referencias principales son el estimulo
suficiente para un desarrollo normal. Son el espejo a través del cual aprende
su rol sexual, es decir, la conducta que se espera en un varón o en una mujer.
El niño se siente semejante al padre o a la madre y actúa como si fueran
modelos.
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